Para mi, la fe es el fruto de la certeza, y la esperanza es, como un rosal que cada día crece más bello y hermoso, siendo ésta, la felicidad de la vida presente y presagio de la vida futura. Los hay quien compra esperanzas con dinero, otros esperan comprobar la verdad de la vida eterna, la resurrección, o la reencarnación para otros.
La esperanza es el pan de los pobres y los sabios: para Aristóteles es el sueño del hombre despierto (Diógenes Laercio. Vida de Aristóteles. Cap.8)
Dice Kempis, que vano es el que pone su esperanza en los hombres o en las criaturas (Imitación de Cristo, trat, Icap.VII)
En el mundo romano, la esperanza era un consuelo (Boecio, La consolación de la filosofía. Para los cristianos es una confianza, una acción de voluntad positiva que te conduce al Reino de los Cielos. En el socialismo real soviético la esperanza es la consumación de las etapas históricas a través de la praxis del materialismo dialéctico. La esperanza apunta siempre hacia al futuro y la aspiración del ideal o deseo concebido, y se encuentra alojada en el corazón, en el centro mismo del ser humano.
Yo creo que un hombre que pierde la esperanza, en realidad no vive ya, vegeta solamente, su alma está muerta. Las etapas espirituales que el hombre va superando en su vida, no son de placer en placer, si no de esperanza en esperanza. Las situaciones desesperadas son aparentes y en realidad no existen, puede parecer que son así para el ser humano que carece de esperanza, pero son solamente pruebas, que una vez superadas, llegaremos un día a comprender su verdadero propósito; la esperanza es la única tabla de salvación en la adversidad. Nadie quiere que la muerte o la enfermedad se presenten rápido y nos sorprenda, todos tenemos la esperanza de que estas pruebas se aparten y distancien cuanto más mejor.
La esperanza de un mundo mejor, en la vida eterna, en la aceptación del Cristo, la búsqueda de la piedra filosofal, el moldear el cuerpo alquímico, la contemplación de la Virgen, la vida contemplativa. Todos estos anhelos son las razones del corazón, la dialéctica del sentimiento. No existe nada más desdichado que el perder la esperanza. Renueva tus esperanzas con cada nuevo fracaso, y espera, aunque creas que se ha acabado todo.
Desde mi punto de vista el problema con la desesperanza, al menos para un cristiano firme, no es tanto la falta de Fe en Dios sino la impotencia, el hastío y la amargura con que experimenta los males del mundo maculado (como el pecado, el sufrimiento y la muerte, que provocan la escisión de la vida respecto a la mera existencia): para mi son como cadenas, y "morir" en Cristo la Llave de la Liberación: como dice el Evangelio, el que "muera" en Él tendrá Vida Eterna (la verdadera vida) pero el avariento con su "vida" (mera existencia mundana, muy mal llamada en el confuso lenguaje humano) la perderá (pues es falsedad y la mentira no se sostiene eternamente) y tendrá Muerte Eterna (la verdadera muerte: mucho más que la mera separación del cuerpo). El problema no es tanto el Fin, como el sufrimiento y el pecado y el temor y la fatiga que lo preceden a lo largo de todo el camino, con intensidad más o menos variable según la persona y sus circunstancias. Muy inspiradora la imagen alquímica del Peregrino traspasando el Velo: a este respecto he encontrado una versión virtual del Silmarillion de Tolkien, y me gustaría que me dieras tu opinión sobre la parte más cargada de simbolismo mistérico, el Ainulindale: http://www.anarda.net/tolkien/relatos/silmarillion/ainulindale.html
ResponderEliminarGnosis en Cristo
pd: Por cierto, hace poco tuve una experiencia mística durante el sueño, en el que mi ánima salió de mi cuerpo (no de forma tan intensamente perceptiva como con la ayahuasca o una ECM, ya que permanecí en el plano espectral de este mundo), aunque no tuve una revelación la experiencia fue en sí enriquecedora, ya que pude comprobar cuan verazmente se aplican a mi persona las palabras del Maestro de “mi Reino no es de este mundo”: en una web ortodoxa leí que la mayoría de la gente se sentía incómoda al separarse de su cuerpo, ya que según el teólogo los humanos no habían sido hechos para habitar solo como espíritus... sin embargo yo me sentí extremadamente confortable siendo incorpóreo, de hecho prefiero ese estado en el que las limitaciones físicas a la kinesis (la astenia, la enfermedad, el ambiente, las barreras materiales...) están completamente ausentes: es maravilloso sentir como uno no camina, sino que se desliza sin la menor fricción solo con concentrar su voluntad, o ascender por el aire y atravesar el techo inmune a la gravedad y a las cadenas de la carne... contemplar las casas de tus vecinos sin que ellos puedan verte, incluso poseí a uno por un instante, y esa experiencia fue aún más reveladora: escogí a un hombre joven y fuerte, porque tuve curiosidad por ver cómo sería habitar un cuerpo que poseyera energía y vigor... y he de decir que me llamó la atención la NULA oposición del alma propia ante mi intromisión: no es que cediera fácilmente, es que era totalmente indiferente, como si fuera inerte... de hecho, a pesar de que yo mismo conservaba una forma pálida, etérea, solo percibía su alma como una sombra amorfa y lánguida difícil de distinguir: sentía su presencia, pero no conseguía discernir su forma, aunque no hubo voluntad alguna que se me opusiera en nada. La conclusión que extraje es que mi alma, como cristiano esotérico de casta sacerdotal es mucho más desarrollada, activa y poderosa que la de un humano vulgar... No obstante, tras unos instantes de disfrutar mi nuevo vigor y lozanía sentí algo completamente inesperado y repentino que me hizo añorar mi cuerpo: suciedad. No física sino más bien en un sentido moral, percibía el pecado (la lujuria en concreto) como algo inherente a aquel cuerpo joven y vigoroso pero que en cambio era incapaz de conectar con un ánima antagónica como la mía, por eso no era algo placentero (ni siquiera un placer perverso y carnal), sino más bien una sensación incómoda, como de pringosidad y hedor de heces que desde los genitales del cuerpo poseído se extendieran cual asquerosa película en ramificaciones. El asco y rechazo se hizo tan intenso que abandoné bruscamente ese cuerpo y regresé ansiosamente al mío propio, agotado y viejo pero de una limpieza envidiable en comparación, tras lo cual desperté. La conclusión de esto es que todo lo que no provenga de la Fuente Inmaculada (Dios) tiene un precio y una doble-cara... vigor a cambio de suciedad, pureza a cambio de astenia: no hay mal que por bien no venga... ni bien que por mal no venga, al menos dentro del alcance de la Mácula. Esto también ilustra mis razones morales y esotéricas para cuestionar la validez moral de la reencarnación.
ResponderEliminarEstimado amigo Aryan, la reencarnación es la única ley natural evolutiva que es totalmente justa, en una sola vida jamás el ser humano podría realizarse como un ser angélico que es su verdadera meta. La reencarnación ofrece la esperanza más justa para poder seguir adelante en una vida de penurias o de dificultades. Cómo se podría explicar que nazcan niños llenos de dificultades, limitaciones y taras, y otros tengan un físico hermoso agradable e inteligente, e incluso genial, que a los cuatro años sean virtuosos musicales o genios en matemáticas e incluso hablen varias lenguas complicadas y difíciles. Es la ley más justa que existe en la naturaleza. Si un asesino despiadado mata o deja morir por egoísmo y ambición a sus semejantes, ¿Cómo crees que debería regresar al escenario del mundo? pues sencillamente habitaría un cuerpo y un cerebro lleno de malformaciones y limitaciones con arreglo a las calamidades que haya provocado a otros. La reencarnación permite al ser humano evolucionar hasta convertirse en un ser espiritual perfecto. Hay seres humanos que siendo jóvenes tienen un alma muy vieja y antigua, porque llevan evolucionando en este o en otro planeta muchos siglos y siglos, hay otros que son viejos y su alma es infantil y poco madura, En el actual Kali Yuga en este planeta la gran mayoría de seres humanos que se han reencarnado son medio animales y humanos, abandonan las mónadas muy rapidamente por esa razón están m´s ceca de los animales que de los seres humanos más evolucionados.
ResponderEliminarSaludos amigo Aryan.
Carlos
La reencarnación es la mayor esperanza para todos nosotros, nuestra especie. Perdemos la memoria en cada encarnación para poder soportar las pruebas por las que tenemos que pasar, pues de lo contrario, si recordásemos muestros orígenes, nos dejaríamos morir y no podríamos evolucionar, perdemos la memoria, pero no la voluntad que nace del yo superior, y es esta voluntad la que nos impulsa a seguir a continuar y a cumplir con nuestro destino. Si fracasamos tendremos que regresar hasta que cumplamos con nuestros compromisos materiales y espirituales, cuando hayamos evolucionado y seamos espiritualmente actos para no regresar a este mundo de pruevas será cuando recuperemos la memoria y al fin podremos comprender el gran propósito de la Evolución.
ResponderEliminarEn esta época de decadencia, desde el punto de vista de la reencarnación se hace precisamente más palpable la superpoblación semianimal que habita cuerpos humanos, es totalmente natural, una de las evidencias más palpables de la edad de Kali Yuga es precisamente la superpoblación de seres de toda condición, predominando las almas jóvenes que se precipitan de las mónadas para entrar en los ciclos de la Gran Rueda evolutiva. Lo peor de esta edad es que hay almas muy evolucionadas que tiene que convivir con otras muy atrasadas y crueles.
Saludos
PD. Añadir que en esta evolución nadie se reencarna en animales, el alma humana no retrocede salvo en casos muy especiales que esotéricamente sería difícil de explicar.
ResponderEliminarSaludos afectuosos a todos
Carlos
Estimado amigo Carlos, entenderás que tus personalísimas percepciones sobre lo que es “totalmente justo” no tienen por qué ser asumidas por los demás. Para empezar no entiendes la naturaleza de los ángeles, que te recuerdo también pueden caer en el Mal más absoluto: son otra raza sapiente, la primera creada, y los hombres los segundos y los herederos: no necesitamos convertirnos en ángeles, tenemos nuestras propias glorias y miserias. Cristo (Dios Encarnado) tomó naturaleza humana, no angélica, así que basta ya de esa mentira de que somos inferiores en esencia a los ángeles. La reencarnación ofrece una manzana envenenada (lógico al ser una doctrina naásica), una cadena que da un horizonte de desesperación a una vida de penurias, ya que ni siquiera la muerte podrá poner fin a esa cadena. Respecto a lo que indicas de los niños, te recuerdo que Dios creó al hombre sin Mácula, a la imagen y semejanza de la Perfección y fue gracias a un ángel caído que se infectó con el conocido resultado de degeneración progresiva: nada de esto es obra de Dios, que te recuerdo no es la única facción espiritual que puede influir en la conformación de un niño en la matriz. La naturaleza es amoral, y la única “ley” que conoce es la p. privada por parte del más fuerte: no tengo por qué compartir su idolatría hacia natura. Ah, ¿y le parece justo que un bebé individualmente inocente tenga que pagar tan atrozmente lo cometido en una supuesta “vida pasada” de la cual no tiene consciencia ni voluntad? ¡Menuda farsa de “esperanza”, “justicia” y “compasión”! Una manzana envenenada, digna de un acólito de Naas. Lo peor es que luego seguramente será de los que critican al Dios bíblico por un infierno de fuego y azufre para criminales adultos y conscientes de sus pecados: hipocresía naásica por bandera. Por otra parte, si tu criminal reencarnado tiene el cerebro tullido difícilmente va a “evolucionar” de manera alguna: tu teoría carece incluso de lógica interna. Después pretendes arrimar el ascua a tu sardina y achacar toda deficiencia o virtud humana a tu idolatrada reencarnación: yo puedo creer que eso va en virtud de los Misteriosos Caminos de Dios y tendría mucha más lógica que presuponer “evolución” espiritual alguna a partir de una maldita lotería cósmica. Por otra parte, te recuerdo que la situación actual ya se dio en generaciones anteriores de la humanidad, lo cual acabó provocando el Diluvio.
ResponderEliminarSaludos amigo Carlos.
Habla por ti, para mí la reencarnación equivale a un infierno arbitrario, a una maldita cadena demoníaca que me ata a la Materia sin garantía ni juicio alguno. O sea, que tú mismo reconoces que si los supuestos “reencarnados” no tuvieran amnesia forzosa se suicidarían: ¡vaya contradicción con la “bondad” reencarnacionista, y con la presencia de voluntad individual! Tu siguiente párrafo muestra tu fe evolucionista, que te adelanto no comparto en absoluto: yo soy un creacionista-INvolucionista, considero que Dios hizo a Su Creación Perfecta e Inmaculada y que fue por la Maculación por lo que empezó a INvolucionar. Pruébeme que la evolución es cierta, porque hasta ahora las pruebas (la Tradición, los hechos conocidos y la lógica) dicen lo contrario (no me cite a Darwin y a los fósiles porque eso no prueba la existencia de mutaciones positivas, y sin eso el evolucionismo es imposible de probar científicamente: que las corruptas “autoridades” mundanas cientifistas digan lo contrario me la trae al pairo).
ResponderEliminarLa semianimalidad “actual” (la superpoblación no es sino consecuencia de una civilización materialmente avanzada que permite un gran éxito reproductivo... lo cual ya ocurrió en tiempos antediluvianos) tiene una explicación perfectamente bíblica, histórica y lógica: sencillamente lo que llamamos “humanidad” no es una misma raza, sino una amalgama de distintos linajes, y en efecto los Grigori de Semyaza (el cómplice de tu inspirador Naas) se dedicaron a “corromper toda carne”, esto es, a hacer brujería (ingeniería) genética para crear una raza de esclavos humanoides a partir de simios (behemah): la mayoría de seres “humanos” actuar son híbridos con la herencia adámica latente en el mejor de los casos (los espiritualmente aptos son aquellos que la tienen despierta o manifestada). Darwin, junto a Nietzsche, Freud y Marx es uno de los 4 Jinetes del Apocalipsis Espiritual Moderno, y esos resabios newagers de base hinduísta que muestras solo son la prueba de que Naas, Satán y el Anticristo son cómplices, así como de que el paganismo y el ateísmo (materialismo) están muy relacionados entre sí: tiempo cíclico (tu “Gran Rueda”), naturalismo (en contraposición al sobrenaturalismo de Dios) y evolucionismo (en esencia reducción a la Materia) son interdependientes unos con otros. Esta misma razón es la que llevó a saduceos y fariseos a hacer una tregua en el deicidio: Cristo rompe este CÍRCULO VICIOSO del Mal con un tiempo LINEAL ascendente, para llevar a Sus Elegidos al Reino de los Cielos.
Saludos
PD: pues esa restricción no es compartida por tu base doctrinal hinduísta y sus derivados que SÍ sostienen la idea de retroceso y reencarnación animal (y vegetal e incluso mineral) como a la par con el avance “evolutivo”. Más bien tu postura parece ser una idea hinduista “descafeinada” semejante a los curas católicos que evitan hablar del infierno porque prefieren adormecer la conciencia de sus fieles con toques de guitarra y “pas i amol”... indudablemente son preferibles a los psicópatas inquisitoriales, pero eso no es óbice para que estén saboteando (inconscientemente, a la vista de que la mayoría ni siquiera ha leído la Biblia, que ya está el catecismo para dárselo masticadito y adulterado según los intereses vaticanos) la Salvación de sus ilusos y superficiales “fieles”. Por cierto, que sepas que no eres el primero en tratar de adoctrinarme en el reencarnacionismo, mira el hilo de la Palingenesia porque ahí ya otro de tu cuerda lo intentó y fracasó, ya que yo no hablo a la ligera ni soy un ignorante de lo espiritual que compre lo primero que le intenten vender con buena retórica. No me importa debatir civilizadamente con quién sea pero conmigo tienes un oponente dialéctico duro de roer. Por cierto, si quieres leer y/o comentar alguno de mis artículos acá enlazo el último: http://milrazonesparacreer.blogspot.com.es/2013/09/dualidades-confusas-por-aryan.html
ResponderEliminarSaludos afectuosos Carlos
Hola Aryan, no pretendo hacer proselitismo de una ley natural que mueve el mundo, a cada cual le llegará el momento de reconocerla en este plano y aceptarla, todo depende del grado evolutivo en que se encuentre la persona. Comprendo los escrúpulos que muestras hacia esta ley, seguramente sea por que eres demasiado espiritual, pero en la evolución humana está incluído las experiencias en el plano físico, a diferencia de la evolución angélica, de ahí la gran admiración y amor que sienten los ángeles hacia la humanidad, la atracción fisica para los ángeles es una tentación, y esa es la causa de la caída de algunos de ellos. Nuestro destino es el mismo que el de ellos pero por diferentes caminos y experiencias
ResponderEliminarSi la reencarnación no es una realidad, ¿cómo podría haber existido, por ejemplo, Mozart, u otros niños prodigio? Oh, sí, un dios voluble y caprichoso otorga súper-inteligencia a unos sobre otros igual que un sorteo. ¿Y por qué Mozart es elegido y no otros? y si Mozart no existía antes de la concepción, cómo es posible que este dios le conceda a él la gracia del talento musical sin tener una experiencia virtuosística que para la gran mayoria puede resultar adquirida en varias vidas de total dedicación. El mismo Dios que creo a Mozart, también creó a los salvajes buenos y a los salvajes crueles, estos últimos jamás tendrían la posibilidad en una sola vida de llegar a ser un niño prodigio, por poner un ejemplo.
Si la reencarnación no existe y solamente disponemos de una vida para desarrollarnos plenamente, o para otros vamos directamente a la nada cuando nos llega la muerte. ¿Por qué este gran esfuerzo de vivir en este mundo físico, si la gran mayoría estamos destinados al esfuerzo y a la miserias físicas y morales a la que estamos expuestos? sólo la reencarnación nos da la oportunidad de evolucionar espiritualmente encarnación tras encarnación hasta convertirnos en seres perfectos dignos de estar en el Reino que nos prometió Cristo.
Un saludo afectuoso
Carlos
La idea de la reencarnación, como la de la evolución, es una idea muy moderna, parece haberse materializado alrededor de 1830 o 1848 en algunos círculos esotéricos franceses "(Guénon, la Teosofía, 104). Esto puede que sea cierto si nos referimos a la palabra "reencarnación" en sí misma, pero la enseñanza se puede encontrar en Occidente desde Pitágoras, y ampliamente discutida en la República de Platón y Fedón, por no hablar de su larga tradición en el hinduismo y el budismo y las variantes más puras y perfectas de los Brahmanes arios y los auténticos yogis. No olvidemos que Guénon niega todo lo que esté relacionado con la transmigración de las almas humanas en animales: Al final de la República, Platón dice que el mito de Er, un soldado que tiene una experiencia cercana a la muerte en la que aprende el destino de las personas después de la muerte (Platón, República, 614b-621D). En un famoso pasaje, Er ve a los seres humanos muertos elegir los físicos disponibles con arreglo a las nuevas encarnaciones. Ulises, el más astuto de los hombres, niega una vida de riquezas y de gloria y en su lugar opta por la de un ciudadano común. Se puede hacer lo mismo investigando un mito similar en el Fedón y de las enseñanzas de los misterios órficos y pitagóricos, en la medida en que sepamos algo concreto al respecto.
ResponderEliminarSaludos
Carlos
Hola Carlos, perdona pero si no te interesara convencerme no te habrías dirigido a mí expresamente para tratar este tema: lo de tirar la piedra y esconder la mano no cuela conmigo. Por otro lado, mi interés no es tanto (que también) cuestionar la veracidad de la reencarnación sino cuestionar su validez moral, de tal manera que aún en el supuesto de que fuera cierta eso no cambiaría mi postura más allá de que para mí Dios pasaría a ser Nihil, entendida como una Paz Perfecta que quiebre ese círculo vicioso que tú llamas “la Gran Rueda). Como dijo Sócrates es preferible ser víctima de una injusticia a cómplice de la misma, y siguiendo este mismo razonamiento te diré que sigo a Dios por ser Inmaculado, no por ser Omnipotente, este es un rasgo totalmente secundario para mí: toda otra “sumisión” que yo pueda expresar es falsa y se limita a la aplicación del proverbio islámico “besa la mano que no puedas cortar” (lo cual promete un eventual apuñalamiento por la espalda pleno de saña vengadora). Por otra parte, lo de la “ley natural que mueve el mundo” es tu OPINIÓN, no un argumento, y las opiniones son opinables, no debatibles: un poquito de seriedad. No es solo por el plano físico: lo que hace al plano físico insoportable es la Mácula, el Antidios que hizo irreconocible a la Creación: solo la Destrucción Absoluta descrita en el Apolcalipsis podrá purgar esa Mácula y RESTAURAR la Perfección Original (concepto incompatible con tu evolucionismo que exige una ascensión naásica desde el Abismo). Por otra parte, contrariamente a la creencia popular del Edén mesopotámico (la zarandaja cientifista del Out of África no merece ni consideración), es muy probable y lógico pensar que el Edén no es totalmente de este mundo, sino un lugar espiritual (lo explico en uno de mis artículo, revisa el blog que enlacé): en la Cábala por ej se reconoce que incluso el Reino de Assiah tiene 2 planos superpuestos, y de ellos el plano material en el que nuestra existencia material tiene lugar es solo la mitad más baja y degradada (por la Mácula, aunque el que sea la parte más baja facilita su maculación). Y el hecho de que me sintiera como pez en el agua en el Assiah incorpóreo implica por lógica que es mi verdadero estado natural, y por tanto el verdadero estado natural del Adam Kadmon que se manifiesta en mí: esto es Malkuth, el Reino, del cual el plano físico es solo el reflejo inferior más maculado. Esto explica por qué tu ídolo, antes de su Caída paseaba por el Edén como príncipe angelical cubierto por un manto enjoyado. También explica como los Grigoris de Semyaza/Azazel pudieron tomar forma física y fornicar con las mujeres antediluvianas: eso fue imperdonable precisamente porque al revés de lo que dices la atracción física no es natural en los ángeles, y menos en su parte sexual. Por esto Semyaza ató a sus cómplices con un Juramento en Hermón, y “compró” a mujeres (esto es: ADN adámico para sus “experimentos” -brujería) a cambio de más manzanas envenenadas (conocimiento pervertido como la guerra, la idolatría y la cosmética, que sus afines humanos utilizaron para extender la violencia, la impiedad, el engaño y la fornicación por el mundo). Los primeros nacidos (y tampoco los hombres primigenios) no son lo suficientemente débiles como para caer por un arrebato de lujuria (algo propio de animales, como bien dice un proverbio eclesiástico), y entre los nefilim no hubo amor sino que más bien se asemejó a matrimonios de conveniencia. No, nuestro destino y función no son los mismos, si bien son similares al ser ambos las únicas razas sapientes creadas por Dios: nosotros no fuimos hechos para interceder como mensajeros (Enoch 15:2), sino para heredar el Reino y juzgar a los ángeles (1 Corintios 6:3/9-11).
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Porque el Adam Kadmon creado por Dios era igual o más virtuosístico que Mozart y similares, y al ser la Maculación una enfermedad degenerativa (visto primero en la mortalidad fruto de la Caída, en la degeneración mundial que provocó el Diluvio, y en el intento de lograr la inmortalidad por asalto (Babel) que resultó en el sellado de la facultad telepática humana (Genesis 11:1), así como en el cumplimiento de la sentencia profética conque Dios castigó a los hombres por la depravación antediluviana en Génesis 6:3 (recientemente la ciencia ha confirmado que el límite biológico para la longevidad humana está justo alrededor de 120 años): nótese que aún tras el Diluvio Dios demoró su sentencia por pura compasión hacia Su Creación (Núm 14:18/Sal 103:8-18), pero claro, cuando el archibrujo Nimrod intentó asaltar el Edén con su Portal (la “Torre”) para tomar por la fuerza el Árbol de la Vida guardado por un querubín con espada ígnea no le quedó más remedio que provocar un hándicap genético que impidiera a la humanidad unirse en Tiránica Rebelión Global... hasta hoy (¿qué te crees que es el NOM y el mundialismo sino la Neobabel? (Mt 24:37-39/Lc 17:26-32). Acá el único sorteo arbitrario y voluble es tu adorada reencarnación naásica fruto de la Mácula: Dios es Perfecto, y como tal creó una Armonía Perfecta: si después sus criaturas se macularon voluntariamente al rebelarse y eso inició una espiral hacia el Abismo no es culpa suya, ¿o vas a negar la responsabilidad individual? Eso te quitaría toda legitimidad moral para hablar de “justicia”: ese Caos es la consecuencia inevitable de tu adorado círculo vicioso: la “Gran Rueda” del Mal. Por tanto, Dios no tiene ninguna obligación de sacar las castañas del fuego a aquellos que lo traicionaron, y si elige a algún individuo para darle un don, eso es como un regalo a agradecer, no una violación de los “dereshos” de la mayoría como tú defiendes en el más zafio pseudo-moralismo igualitarista. Además, los dones de inteligencia y vigor son secundarios frente al Don de Salvación: ¿de qué sirve una mejor corona si vas a caer en Gehenna? Vano consuelo es ser un sabio o fuerte en el Sheol, no así en el Reino de los Cielos, donde cada vaso será colmado según su capacidad. Por otro lado, ¿conoces tú la Mente de Dios para poder juzgar Sus Motivos, o solo haces gala de una soberbia necia al calificarlos de “caprichosos”, solo porque están muy por encima de tu limitada comprensión de criatura? Sobreestimas la experiencia: la “gran mayoría” (behemah) jamás llegarían al virtuosismo en sentido alguno, ni aunque vivieran miles de años: un anciano solo es sabio si ya lo fue de joven (es decir, de manera innata, ya que un potencial puede desarrollarse, pero no hacer brotar peras del olmo), sino no es más que un necio con canas e ínfulas hipócritas basadas en una sociedad digna de él. Los salvajes son o bien una degeneración maculadísima del Adam Kadmon (algo de lo cual Dios no tiene la culpa), o abominaciones espiritualmente inertes creadas por los nefilim como un linaje de esclavos natos (por esto el sufragio universal arruina la democracia: la mayoría de la gente tiende inconsciente e irracionalmente a auto-esclavizar el país donde viven y se les da voto).
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Respecto a tu último párrafo, lo cierto es que a día de hoy la reproducción no tiene razón de existir (Schopenhauer filosofó con acierto al respecto): la exhortación de “creced y multiplicaos” la da Dios ANTES de la Caída, y después solo se justifica por la Profecía del Mesías que debe pisarle la cabeza a Naas: después de Cristo, aún podía justificarse para la predicación del Evangelio mundialmente, algo conseguido en la era colonial, por lo que ahora no hay razón espiritual alguna para engendrar, y si se sigue haciendo es por confusión dogmática o irracional lujuria: sin embargo, Dios no tiene la culpa de que 2 idiotas behemah decidan fornicar alegremente a costa del sufrimiento de un individuo inocente: de hecho, por esto la Biblia está escrita de tal manera que ofrece Misterios a los sabios así como sencillez de Fe para que nadie tenga excusa en el Juicio. La reencarnación es una farsa al igual que la evolución: toda mutación es per se negativa y fruto de la Mácula. No cites a Cristo cuando tu doctrina es completamente anticrística, a no ser que lo hagas como un mero recurso retórico igual que la zarandaja de los “maestros ascendidos”.
ResponderEliminarEfectivamente, la singularidad reencarnacionista del esoterismo pertenece a la Modernidad, a la cual yo como cristiano tradicionalista me opongo firmemente. Nunca he negado que bajo la influencia hinduista haya derivado en múltiples teorías incluyendo en “Occidente” (lo entrecomillo porque en realidad Occidente no es solo un concepto geográfico, sino especialmente cultural nacido del matrimonio de Atenas y Jerusalén: por tanto, Occidente tiene su génesis en el Cristianismo, no teniendo sentido ni raíz fuera de Él). Conozco a Guenón y a su discípulo-rival Évola, pero por mi naturaleza libertaria soy inmune a la falacia de autoridad: solo me inclino ante una Autoridad Inmaculada (Perfecta), esto es: DIOS. Que conste que tampoco niego la parte de “Gnosis” del paganismo (por algo el Mal necesitó seducir a criaturas de Dios para poder operar la Maculación), lo que digo es que igual que Naas es una Falsa Luz, esa es una Falsa Gnosis: una manzana envenenada, como he dicho, porque, ¿quién comería barro envenenado voluntariamente?
Saludos cordiales
PD: te contradices cuando afirmas que mi rechazo al reencarnacionismo se explica porque soy un alma muy espiritual y sin embargo afirmas que es la reencarnación lo que lo ha hecho posible, y que su objetivo es la evolución espiritual: esto no tiene sentido, aunque entiendo que te descoloque porque los de tu cuerda se parecen a los ateos en tanto tratan de negar las facultades de que presumen a sus oponentes... aunque hay algunos ateos que se buscaron la excusa de que si un creyente no es estúpido es que está loco, ¿qué excusa buscarás tú para justificar que un anti-reencarnacionista sea espiritualmente desarrollado? Me encanta cuando ellos mismos dejan en evidencia su mentalidad sectario-totalitaria.
Hola Aryan, dices que eres cristiano tradicionalista. ¿Y desde que época tengo que valorar esta tradición a la que aludes? supongo que no ignoras que los cristianos primitivos gnósticos, su filosofía estaba basada en la reencarnación y la ley de causa y efecto, creencia que fue paulatinamente abolida a partir del Concilio de Nicea del año 325, doctrina que fue suplantada por la absurda creencia en la resurrección de los muertos. Grandes pensadores y filósofos están convencidos de que es la verdadera articulación vital en este mundo - Cosechas lo que has sembrado- ¿te parece injusto? yo creo que esta ley es la posibilidad más justa y creíble que podemos concebir. Un ejemplo, quería referirme a un ser "humano" especialmente maligno, Kissinger. Pero no, pues he caído en la cuenta que este sujeto no es un ser humano, es un -cascarón- una larva inmunda que carece de alma humana, por tanto jamás podrá reencarnarse por el proceso natural al que estamos sometidos la mayoría de los humanos. Este sujeto de volver a reencarnarse sería por los procedimientos oscuros que utilizan maestros en magia negra ceremonial. Pero centremos mi ejemplo en otro individuo que no haya sido aparentemente un "cascarón" o un "portal". es decir, un médium manipulado por los mencionados maestros. Por ejemplo, cualquier asesino y violador que encuentra en la guerra, no un acto de honor o patriotismo, sino la posibilidad de enriquecerse a costa de la vida y la destrucción de sus semejantes, este hombre muere tranquilamente en la cama y sin haber purgado en esta vida ninguna de sus culpas, cuando pase por los largos procesos en los diferentes planos mentales y con el tiempo su Yo le impulse a la necesidad de reencarnarse. Cuando llegue ese momento ¿qué sucede? pues que la Ley no le impedirá a tomar un cuerpo físico para adquirir nuevas experiencias en el plano físico, pero la oferta será muy limitada; seguramente nacerá en una familia muy pobre del Cuerno de Africa (por ejemplo) o, Sierra Leona, o, cualquier zona del planeta en que sea constante la guerra las deportaciones y las aparentes "injusticias" en las que él ha contribuido y participado directa o indirectamente. -La siembra es libre, la cosecha es obligatoria- lo que siembras tarde o temprano lo recoges.
ResponderEliminarSaludos
Carlos
Citas a Adam Kadmon y muestras ejemplos aunque velados de la Kabala judía. Biblia, Kábala, (es la versión hebrea por un casual? cristianismo tradicional. Bien, no lo recrimino, y lo respeto, cada cual busca su camino aunque sea errado y equivocado, tenemos toda la eternidad para rectificar y enmendar errores, no sé si ignoras que los kabalistas judíos creen en su propia ley de reencarnación una inspiración muy particular inspirada por su Demiurgo genético, te paso un enlace que puede ampliar tus conocimientos y simpatias sobre la gnosis judía. http://www.youtube.com/watch?v=RLeFunxQnIw
ResponderEliminarUn saludo afectuoso
Carlos
Pedro: querido y apreciado amigo, discúlpame por no haberme presentado antes, leo tu blog y aprecio mucho lo que escribes. Una apreciación a una (creo yo) imprecisión en este artículo tan bueno en el que estamos. Boécio y su Consolación de la Filosofía, esta obra fue escrita y publicada después de la caida del Imperio, por tanto, poco o nada inspiró a los romanos históricos de ese fabuloso Imperio. De hecho a Boécio se le conocía como el último filósofo romano.
ResponderEliminarUn saludo.
Carlos
Hola Carlos: en la medida en que el cristianismo es la restauración de la Fe Edénica, desde Adán, ¿te parece poco? Primero, los gnósticos no eran un grupo uniforme y jerarquizado como los nicenos, ya que la base del esoterismo es la relación personal del individuo con Dios sin dogmas eclesiásticos de por medio: y la reencarnación, te guste o no, es un dogma de origen hinduista. Segundo, la gran mayoría de lo que sabemos de los gnósticos fue escrito por sus enemigos, e incluso entre los últimos descubrimientos al respecto puede haber mezclado paja con trigo, así que entenderás que me fíe de mi instinto y mi criterio individual antes de lo que una caterva de newagers de barrio con ínfulas de gurú (tontos útiles de la colonización esotérica hindú que se ha denunciado en ocasiones en este blog) pretendan imponerme como la “verdad”. Tercero, ¿cómo que la resurrección de los muertos es “absurda”? Tu necedad es inaudita, sueltas una acusación sin argumentarla y te quedas tan ancho, en la absurda creencia de que los demás tenemos la obligación moral de aceptarla como veraz, y en cambio ignoras sistemáticamente todos o la mayoría de los argumentos que he dado para demostrar que es tu creencia en la reencarnación lo realmente absurdo: ¿tal vez por qué no puedes refutarme? ¿y cómo tienes la soberbia de creer que puedes darme lecciones espirituales cuando eres superado por un chacra inferior (usando tu terminología)? Es realmente divertido ver como cada uno se parece a su Dios, y en tu caso como tratas de escurrir el bulto como Naas. ¿Podrías dar algunos nombres concretos de esos supuestos “grandes pensadores” en lugar de volver a tratar de colarme una falacia de autoridad que encima es nebulosa? Aunque en realidad me da igual, ya que incluso entre los mejores la inteligencia de la criatura es limitada, y por tanto no tiene valor ante la Mente Ilimitada (Is 44:24-26/1Cor 1:18-25): como dijo John Knox “Un hombre que está con Dios, está siempre en mayoría”. Sí, me parece injusto tal como tú lo planteas: una ley solo es tan válida como la autoridad que la impone, y en este caso lo siento pero un ídolo al que mi Dios pisó la cabeza RESUCITANDO DE ENTRE LOS MUERTOS (sí, eso tan “absurdo” según tú, no me extraña ya que tienes que defender a tu padre el Diablo, como bien dice Juan 8:44) no es una autoridad legítima para imponer ley alguna, ya que él mismo se rebeló contra la Ley antes que Adán. Además, ya me he molestado en argumentar por qué la reencarnación es INMORAL e INJUSTA para que ahora pretendas quedar por encima solo con una frase bonita y demagoga: eso no cuela conmigo: o te lo curras y me refutas o guardas silencio, pero no voy a regalarte la “victoria”, ya que esto no es solo una pugna retórica entre tú y yo sino que somos actores en el escenario que es un foro y yo como cristiano tengo el derecho y el deber de pastorear a los lectores silenciosos que son nuestro público para salvarles del veneno de las serpientes como tú: debo al menos dejar clara la supremacía crística para que si eligen envenenarse no tengan excusa alguna cuando estén ante el Trono del Juicio y sean arrojados al Fuego Eterno de la Perfecta Justicia del Único y Verdadero Dios: esto es la Guerra Santa descrita en Efesios 6:12. Después vuelves a contradecirte cuando le niegas la humanidad a Kissinger, ¡cómo sino hubiera tiranos y pederastas mil veces más criminales que él! ¿Con qué derecho juzgas su humanidad, necio naásico imbuido de soberbia carnal?
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En realidad Kissinger y gente como él pertenecen al mismo linaje que tu ídolo y sus cómplices, es un Ben Caín, la semilla de un linaje de nefilim encarnados, los que en tiempos antiguos fueron llamados sacerdotes-serpiente, el último de cuyos individuos puros fue ejecutado por Pedro apóstol en un duelo mágico en Hechos 28:1-6 ¡Que irónico que este tipo de sujetos estén liberados de la reencarnación según tú, a la que solo acceden voluntariamente por brujería! Respecto a tu siguiente ejemplo, ya viene señalado en Eclesiastés 8:14 y explicado en Romanos 3:10-18: entre los caídos, sean humanos, ángeles o híbridos, no hay verdaderos “buenos”: solo malos y peores. De todas formas, una explicación fácilmente comprensible para la lógica humana sería que Dios permite que los impíos gocen y los justos sufran en esta vida porque será el único tiempo en que puedan sentir dichas cosas respectivamente: tras el Juicio, solo habrá Paz para los justos y Tormento para los impíos. Y además tu “lógica” tiene varios fallos, para empezar el castigo o el sufrimiento no tiene per se valor rehabilitante, antes produce el efecto contrario como se vio en el caso del Faraón y las Plagas de Egipto: un “arrepentimiento” superficial por no poder soportar el tormento no es verdadero arrepentimiento, y es lógico ya que la reacción natural al dolor es el odio y la rebelión eternos, incluso si son impotentes. Y esa idea de que el sufrimiento es purgativo es tremendamente falsa y mundana/carnal, así como esa santificación de la pobreza: ¿piensas que los negros salvajes, por ser miserables y sufrir, no son crueles y malvados? Por supuesto que lo son, y mucho más que los “capitalijtaj malbaoj”, de hecho una de las razones de su miseria perpetua es que son incapaces de conservar un excedente ya que cuando uno de ellos (generalmente el más elevado moralmente hablando) intenta ahorrar del fruto legítimo de su trabajo (y no parasitar de la “ayoda” occidental, perdón, “internacional”) sus propios vecinos y familiares le saquean hasta igualarlo por lo bajo: ese instinto, quintaesencia de la envidia, demuestra que no son adámicos sino behemah puros (el único lugar de la Tierra sin genética “neandertal” es el África Subsahariana, ¿curioso verdad?) creados como raza de esclavos que neutralizan automáticamente cualquier intento de elevarlos por encima del nivel del fango: toda esa mentira del “buen salvaje” ya la tengo muy vista y conmigo no cuela: prueba con un retrasado mental (te aclaro que para mí la mayoría de la gente son retrasados mentales, por eso pueden ser tiranizados por una caterva de cainitas corruptos), que con todos los que hay tienes para elegir. ¿La siembra es “libre”? ¿Cómo puedes decir eso en unas criaturas maculadas que tienden de forma natural al Mal? ¿Sabes que la única razón por la que los cristianos verdaderos siguen pecando mientras viven es porque la Mácula encadena sus cuerpos de manera involuntaria, como bien se dice en Ro 7:15-23/Gal 5:17? Y en una norma más concreta, ¿conoces la deshumanización satánica que se practica en los ejércitos y las guerras como para decir que la voluntad de un soldado es totalmente “libre”? Pero además, hay reencarnacionistas (como Virgilio en el hilo de la Palingenesia) que establecen que siempre restaría la posibilidad de vagar eternamente como un espectro, posibilidad a la que de ser cierta la reencarnación yo me acogería sin dudarlo: si estoy condenado a existir al menos mi existencia será de una voluntad consciente y en un medio en el que me sienta más cómodo que en la materia: ese asesino de tu ejemplo tiene que ser mongólico profundo para aceptar el reencarnarse a cualquier costo: no niego que una existencia espectral, solitaria y tediosa sea insoportable, pero ciertamente no lo es más que una material (y menos como la describes), y al menos sí mucho más digna y limpia.
ResponderEliminarSaludos
¿Velados? Di más bien SUTILES y PERTINENTES, yo nunca he negado mis simpatías cabalísticas, y si realmente llevas tiempo leyendo este blog como le has dicho a Pedro ya deberías saberlo. ¿Ese vídeo que me has enlazado es tu “prueba” de que los cabalistas son per se reencarnacionistas? Pues me parece un completo FAIL, ya que para empezar los “judíos” post-diáspora (racialmente jázaros y espiritualmente fariseos) tienen poco o nada que ver con el judaísmo bíblico que culmina en Cristo (los cristianos somos los verdaderos judíos e israelitas, no la Sinagoga de Satanás denunciada en Apo 3:9): de hecho para ellos la Torá (Ley Mosaica) es inferior en autoridad al Talmud (compilación de reflexiones rabínicas -es decir, DOCTRINA DE HOMBRES, NO DE DIOS- que incluyen blasfemias anticristianas inmundas directamente salidas del Infierno). Partiendo de esta base, lo que diga un mago/sacerdote PAGANO lo cojo con pinzas, y por lo demás el tema del Demiurgo, nacido de la exageración difamatoria de lo que los enemigos nicenos de los gnósticos escribieron sobre ellos y recogido por los newagers de tu cuerda, lo conozco perfectamente como para no tragármelo como dogma, una actitud tremendamente EXOTÉRICA (sí, vosotros los reencarnacionistas tenéis unas ínfulas de singularidad (igualitas a las de los izmierdistas, con resultados tan “solventes” como los jemeres rojos) con las cuales pretendéis colar que por ser exóticos y heterodoxos ya sois esoteristas, cuando son 2 cosas completamente distintas, ya que por esa regla de 3 toda la espiritualidad dogmática de matriz hinduista sería esotérica, lo cual es obviamente falso a no ser que quieras adjudicar a la raza asiática la condición de “superhombres” de forma infundada) y antiespiritual por reducción tácita a la materia. Deberías prestar atención a los argumentos de tus oponentes, ya te advertí que la falacia de autoridad no funciona conmigo, igual yo te podría poner un vídeo del chalado de Yehudá Ribcó hablando de la “raza judía”, una suerte de trasúnto inverso del delirio nazi que en gente seria sin demencia no provoca sino carcajadas.
ResponderEliminarUn saludo afectuoso
Gracias Carlos, tienes razón, la influencia de Boécio fue para el mundo cristiano de la Edad Media, su Consolación de la Filosofía es una joya.
ResponderEliminarSer partidario o no de la reencarnación en sí mismo no plantea grandes problemas espirituales, creo yo; los ateos y agnósticos son los que más debaten y discuten sobre esta creencia, por lo menos los que yo conozco. Los agnósticos se encuentran básicamente en la renuncia a saber nada de Dios, que supone lo incognoscible por excelencia, por tanto no les interesa...y algunos, en muchos casos se pasan la vida hablando de Dios, mostrando una de sus más graves contradicciones. Si para ellos Dios no existe el problema mismo de su existencia carece de sentido. La reencarnación y la ley de causa y efecto para ellos es un laberinto de fantasía metafísica creado por la necesidad de una vana esperanza. No entiendo la necesidad que tienen muchos de ellos el plantearte el problema de la fe, si para ellos carecen de base, salvo que tu vida se encuentre vacía y desprovista de verdaderas metas.
ResponderEliminarReencarnación o no, si aceptamos que es una ley natural los verdaderos buscadores tarde o temprano la encontrarán como una revelación.
Aryan, este individuo Yehudá Ribcó tiene que ser todo un personaje, gracias por citarle, le haré un siguimiento porque estos tipos suelen ser interesantes desde el punto de vista sicológico.
ResponderEliminarUn saludo
Pedro, es cierto que esa dicotomía per se no tiene por qué ser un problema, pero cuando se empieza tratando de imponer una opción como conditio sine qua non para la Verdad esotérica, la autodefensa es un derecho y un deber. Valga de ejemplo lo que suelta el amigo Carlos acusando de “absurda” la idea de la resurrección de los muertos: esto es un ataque gratuito a la Cristiandad y a Nuestro Señor Jesucristo. Por eso le he puesto de serpiente venenosa para arriba: si alguien encuentra espiritualmente confortable la idea de la reencarnación es su problema y me da lo mismo, pero en el momento en que trate de forzarme (moralmente hablando) a encadenarme con él me defenderé de forma IMPLACABLE. En virtud de esta idea de librepensamiento no me he preocupado tanto por demostrar la falsedad o no de la reencarnación (que, al fin y al cabo, es una cuestión de tener o no una base dogmática hinduísta), ya que lo considero un asunto de Fe individual, sino más bien de cuestionar su inmoralidad e injusticia al menos en lo que se refiere a mi persona y a mi particular visión espiritual. Que los ateos y agnósticos (cada vez que oigo el término me descojono ya que etimológicamente se están llamando ignorantes a sí mismos) sean hijos espirituales de Azazel-Satán no significa que yo, un hijo de Jesucristo deba tolerar los excesos de los hijos de Helel-Naas. En efecto, un agnóstico no es quién “se hace preguntas” como suelen decir para excusarse, sino quién se autocomplace en la ignorancia por renunciar a la búsqueda de la Sabiduría: básicamente, porque en el momento en que la encuentre (o crea encontrarla) dejará de ser agnóstico. El caso ateo puede ser mucho más grave, ya que en su versión militante bien puede llevar al genocidio de espirituales en nombre de un supuesto “bien de la humanidad/clase/raza/mujer “liberada”/inserte la excusa de su preferencia”, no hay más que ver como TODOS los totalitarismos del siglo XX han sido militantes, ya sean ateos o simplemente anticristianos (con la “excepción” del borreguismo franquista “no te metaj n’politikaj, killo”), destacando los comunistas en cuanto a su “amor” por la humanidad (aunque si le hubieran dado más cuerda “Wotan Khan” Himmler tampoco se hubiera quedado corto).
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Por otro lado, el problema del panteísmo oriental es la arbitrariedad que promueve, no es de extrañar que el reencarnacionismo, en un sectarismo digno del peor ethos asiático, niegue la individualidad. En cambio, el monoteísmo occidental está en perfecta armonía con el ethos caucásico cuyo sentido de Justicia se basa en la precisión de la misma y en la responsabilidad individual: para un occidental verdadero, sin individualidad no hay verdadera Justicia, ya que la imputabilidad se anula en una nebulosa arbitraria: esta dicotomía es perfectamente lógica si entendemos que tanto semitas como jafetitas fuimos separados por Dios de la artera estirpe de Cam: el héroe oriental idolatra al dragón que el occidental ejecuta. Es lógico que los camitas, al verse condenados a la servidumbre por causa del crimen de su progenitor, buscasen desesperadamente la única opción espiritual que les amparase: Naas. En realidad, Noé hace a Jafet linaje del principado y a Sem linaje del sacerdocio, eso explica por qué los europeos pre-cristianos, a pesar de su rica filosofía nunca tuvieron una espiritualidad seria como la de los semitas persas o hebreos, por lo cual, hasta que Cristo no realizó la Restauración Edénica se vieron espiritualmente sometidos a la influencia camita a través de Egipto y la India. Por lo demás, como ya he dicho en otras ocasiones el mito ateo de que la Fe deviene de la necesidad de “esperanza” solo tiene sentido para una mente hedonista esclava de la Materia: yo no tengo el menor miedo de qué los ateos tuvieran razón, ¿qué he de temer de la Inexistencia, no es acaso otra forma de alcanzar la Paz Eterna y la Liberación de la Mácula? Esta es la razón por la que espiritualmente el ateísmo no me hace sentir amenazado, a diferencia del paganismo: con Satán pugnamos en cuerpo, con Naas en espíritu. Yo si “entiendo” (en el sentido de comprender que causas lo provocan), aunque no comparto para nada la razón de la agresividad atea: es la misma razón que lleva a los behemah a saquear a su vecino próspero para perpetuar la igualdad, ya que al ser incapaces de elevarse a sí mismos, necesitan imponer su propia miseria a los demás para no verse consumidos de envidia, complejo y miedo a lo que les supera. La mayoría no son conscientes de esto, e incluso si lo son tratan de maquillarlo y excusarse en mentiras bonitas, pero el instinto del esclavo de mantener su esclavitud así como la de sus semejantes sigue operando automáticamente: por algo el único pueblo ateo de forma natural es el Hadza, ¿o acaso los simios tienen sacerdocio?
ResponderEliminarYo solo acepto una Ley, y es la del Dios de la Biblia tal como yo la interpreto, ya que es la única verdadera Justicia que he hallado en mi caminar.
Ese tipo es un supremacista “judío”, que a través de una pretensión de “compasión” hacia los “gentiles” (es uno de los principales promotores del noajismo, enésima versión de religión mundial) pretende colar el peor anticristianismo del Talmud: se autoproclama “moré” (maestro), aunque yo más bien le daría otro título: aspirante a Falso Profeta y siervo del Anticristo. En realidad, incluso buena parte de los “judíos” no le toman en serio, considerándole poco más que un chalado con carisma, y no me extraña: los nazis soltaron la gilipollez de la “raza judía” como si fuera un linaje aparte de toda la humanidad que no vivía más que en las caricaturas de la propaganda (llegaron a decir que los “judíos” eran inferiores a los NEGROS, lo cual es la prueba de hasta qué punto el sectarismo político sustituyó a la seriedad racialista del XIX), y luego los sionistas más dementes como Ribcó reciclaron ese delirio dándole una interpretación inversa. Estaría bien que escribieras un artículo con las conclusiones de tu seguimiento, y también sugeriría otro sobre la colonización esotérica hindú en el Occidente actual que hemos comentado en varias ocasiones y la relación que tiene con las pretensiones de singularidad reencarnacionista del esoterismo.
Un saludo